Ámate, valórate, conviértete en la naranja completa que siempre y en toda circunstancia has sido, aprende a saborear tu propio jugo y cuando estés lista compártelo con quien vaya a valorar su dulzura y esté dispuesto a compartir su jugo asimismo. Y disfruta, disfruta de la vida, goza de cada oportunidad que tengas, pues cada paso que das, le das un nuevo tinte de sabor a tus gajos, haciéndote más rica, más jugosa, teniendo poco a poco más para compartir, no hay nada mejor que el jugo de una naranja madura, completa, que se ama y se valora. Crea bucles en todos y cada cadera y mantenlos abiertos con las manos. El extremo de ejecución de la cadena (A) debe reposar en la superior del bucle. El extremo de ejecución de la hebra (B) debe reposar debajo del bucle.
Otra almohada debe ir bajo su cintura, preferiblemente cubierta con una toalla o algo por el estilo. Las piernas deben estar abiertas, ligeramente doblados las rodillas, exponiendo sus genitales tanto como es posible. Por supuesto, cuantas más almohadas podamos emplear para hacer la situación lo más cómoda posible, mejor. Lo idóneo es fijar la cita en un día en que todos puedan estar descansados y con tiempo para prepararse para el encuentro, escoger bien su ropa, salir con buena onda. Nada más desapacible que salir enojados por el hecho de que alguno de los dos se retrasó o porque un inconveniente no resuelto provocó cancelar la cita. Ideal es escoger un día relajado, en tanto que hay días en que se dan situaciones laborales, cansancio, tacos viales, etcétera que nos alteran el ánimo, sin perjuicio de que todos y cada uno de los días son un buen día para swingear de acuerdo a nuestras actividades. Se aconseja asimismo elegir un sitio cómodo para conversar, con música ambiental suave que nos permita percibir al otro.
Si al pasear todo este recorrido usted todavía no se siente capaz de hacer el paso 9 y siente que no ha podido perdonar, debe hacer una evaluación muy franca ¿En quién está la complejidad? ¿En usted que quizás tiene el corazón endurecido o bien quizá no ve un cambio ni arrepentimiento auténtico en su esposo(a)? Si encuentra que el problema es suyo sería bueno ir más despacio, recuerde que el perdón es un proceso y quizá precisa un poco más de tiempo, haga nuevamente el ejercicio del dolor, la perdida, revise si ha estado cortando con sus pensamientos adictivos, etc. y regrese al paso 9 cuando se sienta listo(a). Debe recordar que no disculpar es quedarse atado junto al otro y seguir nutriendo toda una gama de dolor y rabia que no le hace bien a , ni a su cónyuge y menos a sus hijos.
Movimientos veloces y al azar
Asimismo, la creencia de que con las relaciones sexuales se puede lograr poco menos que el séptimo cielo, conforme nos muestran las películas, puede decepcionar a mucha gente si no lo alcanzan. Con considerablemente más razón, si no nos gusta nuestra pareja sexual nos volveremos inapetentes, más la mujer que el hombre. Otro de los temores habituales en los novatos del cunnilingus radica en pensar que su lengua va a cansarse antes que su pareja llegue al clímax. Para evitar ese cansancio de la lengua es esencial ir alternando los trazos que se efectúan con ella, los movimientos y el modo perfecto de actuar. Se pueden intercalar besos. Se puede actuar con los labios. Puedes servirte de tus dedos para que la estimulación no cese mientras que tu lengua se toma un reposo. Despreocúpate. Va a llegar el momento en que se corra. Y el 30 por ciento eludió las relaciones sexuales por exceso de trabajo, sobre todo hombres, y un 10 por cien lo evitó por falta de atrayente o por exceso de peso. La psicóloga Ximena Cruz de la Universidad de Chile, especialista en terapia de familia dice que cualquier situación que nos haga meditar en demasía provoca una inmediata desconexión con el cuerpo y puede afectar a la vida sexual de una pareja Recomienda actividades en común, no ver las noticias en televisión, y que es mejor optar por una película.
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A todo ello sumo un carácter sociable y extrovertido
Cuando se habla de arte erótico japonés es imposible eludir algunas referencias que semejan inexcusables. Una de ellas es el shunga, es decir, la tradicional ilustración nipona que tiene como tema fundamental el sexo y sus distintas manifestaciones y al que dedicamos un blog post en esta sección. Otra de ellas es el shibari, esto es, lo que de manera coloquial y demasiado reduccionista llamamos el bondage japonés. La tercera referencia, frecuente cuando se habla de erotismo japonés, es la de la figura de la geisha. La figura de la geisha, envuelta en la bruma del mito, se levanta ante nosotros como la figura simbólica del erotismo japonés. A ella se asocia la elegancia, la delicadeza y la sensualidad. Una cuarte referencia erótica nipona ineludible sería una película que aún el día de hoy, cuarenta años después de su estreno, se sostiene parcialmente censurada en Japón. Esa película es El imperio de los sentidos, la polémica y turbadora obra de Nagisa Oshima. Ambientada en los años treinta, la película de Oshima mostraba la apasionada historia amorosa y sexo que vive una pareja que, en una búsqueda agobiada y sin tabúes del placer, flirtea con el sadismo y el masoquismo hasta llegar a los límites mismos de la muerte.
Asimismo la mía lo fue haciendo. Me excitaba contemplar cómo mi prima apretaba los dientes mientras que sus dedos se paseaban por los rincones de su intimidad y entreabría los labios y dejaba ir su cabeza hacia atrás separándola de aquel cojín que le había tolerado aspirar el aroma salino de mi coño. Entré a mi ensayo persuadido de que un mal padre no es nunca, ni siquiera a lo largo de estas visitas esporádicas, una buena persona. Mas también me quedé pensando en lo peligrosa que puede resultar la amargura de una mujer agobiada por la vida que misma eligió. Sin embargo, la realidad es otra, una relación de pareja va alén de la unión de 2 personas, implica la convergencia de dos culturas, sistemas de opiniones, pautas de comportamientos y esperanzas, en donde cada uno de sus miembros aporta compromiso, lealtad, apoyo mutuo, una comunicación eficaz y predisposición para enfrentar obstáculos, logrando de esta forma una identidad propia y en la cual se permanece por elección, y el mejor reforzador es el desarrollo tanto individual como en pareja. Llegar a este punto es un jardín maravilloso, mas como en todo jardín existe la posibilidad de que aparezca la indeseable maleza que si no es removida a tiempo pone bajo riesgo la belleza y funcionalidad de lo construido.
Masturbarse ante él, utilizando un dildo
Cuando volvió llevaba en sus manos una botella de espumante y un bol con hielo con algo de color dentro. Ana lo miraba sonriente y curiosa. Cuando Fred dejó ambas cosas en la mesa al lado del sillón, vio que el bol contenía cerezas de un colorado obscuro muy intenso enfriadas en hielo. Ya charlamos en su momento en este weblog de cómo la robótica llegaba al planeta de los juguetes sexuales y de de qué manera las muñecas eróticas ya apenas tenían nada que ver con las viejas y, digámoslo claramente, miserables muñecas hinchables que ser convirtieron, por su cutrerío, en objetos risibles destinados a gastar mil y una bromas en aniversario y despedidas de solteros.
Es esa elocuente concepción del futuro; esa percepción del mañana como si fuera algo de cinco minutos; ¡todo es tan simple, sumamente rápido o bien lento! a diferencia de la marcha que los adultos le imprimimos a las actividades, a los conceptos. ¡Todo es en 2 toques!, al paso que a nosotros se nos atora la garganta, pues pensamos en concepto de cuánto vale, cuánto tiempo lleva; cuantificamos en grados de complejidad y también inversión de esmero… ¡Adiós! acostumbramos a decir, a los planes de carrera; a las metas que ilusamente trazamos para ellos o para ellas…. ¡Adiós, trajes bonitos, vestidos lisos y en colores serios! ¡Adiós tendencias sobrias y peinados estilizados!….Ahora llegan los colores arrebollados; los peinados ensortijados y hasta medio rapados; la moda cambia más que hilos de agua entre las piedras… y ¡hasta la paz se ve amenazada! ¡He perdido mi chico!, ¡He perdido mi prostituta! más de un adulto, madre o bien abuela ¡exclama angustiada!
Muchas pueden ser las causas de este problema, entre ellas se encuentran los trastornos procedentes de una educación muy recia, la rutina, los inconvenientes físicos y estéticos, las ideas equivocadas, la mala información, etcétera Ahora se cuentan las más comunes. Hay dos tipos de formas de vivir. Una: orientada por el miedo. Otra: orientada por el amor. Un humano que se guía por el temor está de manera permanente calculando, planificando, haciendo arreglos, resguardándose. Y así malgasta y desperdicia su vida. Sin deberes, sin responsabilidades, sin las obligaciones que el amor implica, no hay colectividad formada y el erotismo entonces acaba en el acto, pues es placer puro, inútil como un juego que no conduce a nada.
¿A qué esperas para comenzar la que puede ser de las mejores experiencias sexuales de tu vida?
Me arrodillé, abriendo mis piernas, frente a la mesa de té donde estaba mi contrato por tresdoblado. Tomé el contrato y lo leí en voz alta. No sé si la voz me tremía o bien no, pero yo sí que tremía. Tras leerlo en voz alta, cada uno de ellos de los presentes me hizo ciertas preguntas, como si estaba segura de firmarlo o bien si había algún detalle en el contrato con el que tuviera dudas Se equivocaba. Una y otra vez. Creía ciegamente que entre tantos calvos diferentes llegaría a conocer a alguien especial; no obstante, ni tan siquiera sabía de qué forma había de ser un hombre para gustarle. A todos y cada uno de los valoraba según la única escala: mejor que Pol en esto, peor que Pol en aquello. Más alto que Pol o bien más bajo que Pol. Más alegre que Pol o menos alegre que Pol. proseguía siendo su punto de referencia, pese al mucho daño que le hizo. No todas las mujeres hallan su camino al orgasmo sencillamente. Hay muchas razones para esto, tanto psicológicas como fisiológicas. Si no está seguro de haber tenido un orgasmo, es probable que no lo haya hecho. Un clímax es un evento fisiológico diferente que sería difícil pasar por alto. Aunque no es necesario tener un orgasmo para disfrutar del sexo, muchas mujeres sienten que se pierden algo. Puede empezar a sentirse engañado si no tiene el mismo género de sensaciones intensas que su amante experimenta con el clímax.